viernes, 16 de marzo de 2012

Literatura por palabras

En los Encuentros Literarios Cósmicos, sobre todo demostramos que no le tenemos miedo a la página en blanco. Con cualquier cosa podemos crear. Las ideas, las semillas de un texto literario, están por todas partes. Solo hay que aprender a mirar. Cualquier idea que surque el aire puede servirnos para emprender el vuelo.

Así lo hicimos en la última sesión, a partir de los anuncios por palabras publicados en el “Buzón de amigos” de una revista de tirada nacional. Leímos una serie de anuncios, los más llamativos, y a partir de ahí, echamos a volar nuestra imaginación. Jugamos a inventarnos anuncios nuevos, a responder a alguna de esas llamadas, a imaginar quién había escrito el anuncio y por qué, a calcular las posibilidades de éxito de la cita... En cursiva están los anuncios reales, y debajo, las propuestas que inventamos sobre la marcha:

ANUNCIO: “Sonsoles, 21 años, maquilladora, asesora cosmética, simpática, muy sociable, a veces un poco borde. Busco relación estable. Madrid”.

Sonsoles, sí, empezaré por mi nombre... o mejor digo Sonso, que es más accesible. No, Sonsoles que luego me toman a pitorreo. Y qué más... pondré mi profesión, que es muy femenina, asesora cosmética mejor que maquilladora, que resulta más vulgar. No, no, mejor pongo sólo maquilladora que luego me preguntan que qué es lo de asesora cosmética y me enrollo y me enrollo y a los hombres lo único que les interesa es lo que les interesa... así que eso, maquilladora que es muy femenino. Claro que tendré que ir pintada como una puerta, porque luego no se lo creen y empiezan con la coña de que si miento o no miento, que luego me cojo un cabreo... y yo me conozco, que por las buenas, muy buena, pero por las malas no hay Dios que me aguante. Pero claro, es que no se puede llegar así a la primera y decirme a la cara que lo que digo es mentira, pero si yo no necesito mentir a nadie, bueno, es que yo no necesito a nadie y menos a ningún payaso, a ningún tonto a las tres como el de la última cita, el tal Richie, mira qué nombre Richie... ¡pues no me dijo que era un poco borde! ¿Yo borde? Pero si soy un encanto, pero lo que no me puede decir un tío que acabo de conocer... sí, que soy un poco borde. ¿Qué pasa, que estaba buscando una geisha? Pues no, yo tengo lo que tengo que tener, personalidad, y lo digo así en tres golpes: per-so-na-lidad, bueno en cuatro. Y qué pasa si soy borde, lo que soy es auténtica, esto te jode. Estoy harta de tanto mamón, pues sí, soy borde, sí, porque puedo, sí que lo voy a poner y todo. Sonsoles, maquilladora, un poco borde y a quien no le ponga, pues eso. Se queda sin la Sonso. Y sin la Sonsoles.
(Mayo Belzuz)

***

ANUNCIO: “Varias personas desean ampliar grupo con gente mixta, entre 50-60 años, para compartir actividades, viajar y pasarlo lo mejor posible. Madrid”

¿Será posible que vuelva por fin a salir de casa sin vergüenza, sin preocupación? Confío en que sí, gracias a vosotros, misteriosos amigos del mensaje del periódico. Desde que mi amigo Ferrán se fue a Kenia no he encontrado a nadie en quien pudiera confiar, adie digno de que le llamase amigo (bueno, lo del facebook es ora cosa, amigos por pantalla interpuesta, nada que ver). He leído vuestro anuncio y creo que cumplo todos los requisitos: tengo 52 años, me encanta viajar y me gustaría pasarlo lo mejor posible. Y sí, soy mixto, como especificáis al principio del mensaje. En mi caso, soy Rodolfo de cintura para arriba, como cuando estoy sentado detrás de una mesa, pero de cintura para abajo tengo patas de cabra. (Por suerte no nací en la Edad Media, porque entonces me habría considerado una encarnación del demonio... ya ves, a mí, que soy un santo) En cuanto a los destinos de las excursiones, no me cierro a ninguno, pero me resultan muy inspiradores sitios como Gredos, que está bien cerquita, además. O Capri, también me llama la atención. Quizá algún día podamos ir a Kenia, a ver a mi amigo Ferrán. Él es mixto de hombre y elefante africano. Y muy buena gente mixta, también. Hasta pronto. Rodolfo.
(José Manuel Fernández)

***

ANUNCIO: “Soltero de 46 años, sin hijos, 1.80, deportista, romántico, cariñoso, buena persona. Sabe a quien busca”.

… Y digo que sé a quién busco porque estoy seguro de que te voy a encontrar, seguro de que caerás en la trampa, seguro de que sigues leyendo estas páginas ávidamente cada domingo con la ilusión imbécil de encontrar a tu príncipe azul. Y cuando creas haberlo encontrado, ¡ah! Cuando vayas a la cita con tu mejor vestido y maquillada como una puerta y las manitas cruzadas sobre el estómago tratando de disimular la barriguita que ya se te empieza a notar y esa sonrisita estúpida que se te pone cuando intentas agradar.... con esa cara bobalicona irás a la cita y te quedarás petrificada cuando me veas en la puerta, sonriéndote galantemente, como un señor, dejando pasar a las damas primero, faltaría más, y te traeré una rosa, por supuesto, amarilla que es la que más te gusta aunque a mí me dé aso, porque siempre te ha dado igual que yo pensara que el amarillo es un color de mal agüero, pero mira por dónde me vas a dar la razón, esta vez verás mi rosa amarilla y sabrás que es cierto, sabrás que el mal augurio se ha hecho realidad.

***

VANE, 20 años, coqueta, bien maquillada y amante de las buenas extensiones y piercings. Busca chico chulazo, cachas, con cara de malote, barba de tres días, con coche propio (preferible tuneado, con buenos altavoces y color amarillo) para pasear por el extrarradio, tatuarnos juntos y lo que pueda surgir...

***

ANUNCIO: “Hombre de 39 años desea conocer chico, entre 28-45 años, le interese hacer excursiones con coche, entre semana, pueblos Comunidad de Madrid, que él tenga coche”.

Cariño, ¡tú lo que quieres es que te coma el tigre! Lo quieres todo. ¡Y querrás que ponga también la cama! El completo son 300 euros.

***

ANUNCIO: “Señora estupenda, 49 años, alto nivel físico, cultural y económico, desea conocer señor similares características. Abstenerse no equiparables. Madrid”.

Soy el equiparable. Señor apuesto, 50 años, ex modelo de pasarela, filósofo y millonario. Pequeño detalle que espero que no afecte a nuestra relación. Tendremos que vivir en Indonesia, es el único país donde no me busca la Interpol. Un pequeño malentendido de tráfico de drogas.